Comunidad Universitaria conmemoró la Pascua de Monseñor Antonio Moreno – UCSC
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Comunidad Universitaria conmemoró la Pascua de Monseñor Antonio Moreno

Por Constanza Saavedra Ortega

Con una Misa en la Capilla Santa María Reina del Campus San Andrés se recordó al fundador y primer Gran Canciller de la UCSC. 

En conmemoración del 11° aniversario de la Pascua de Monseñor Antonio Moreno Casamitjana, la Comunidad Universitaria participó en la Misa que se efectuó en la Capilla Santa María Reina del Campus San Andrés de la Universidad Católica de la Santísima Concepción (UCSC).

La eucaristía fue presidida por el Director de Pastoral UCSC, Pbro. Víctor Álvarez, quien destacó el legado y la dedicación de Monseñor Moreno Casamitjana a la educación y a la comunidad católica de la Región del Biobío.

“Tuve la gracia de ser alumno de él y poder compartir y aprender de sus enseñanzas. En esta fecha estamos recordando la misión de Monseñor Antonio, que nos conecta con nuestra misión como Universidad. Por ello, queremos dar las gracias a Dios por nuestro fundador, recordando su memoria y recordando también el origen de nuestra Institución”, expresó el Padre Víctor en su homilía.

Monseñor Antonio Moreno Casamitjana, quien fue Arzobispo de Concepción por 17 años, es recordado como el fundador y primer Gran Canciller de la UCSC. Su visión y compromiso con la educación católica llevaron a la creación de la universidad el 10 de julio de 1991, asegurando la continuidad de la obra educacional católica en la región. Su trayectoria académica y pastoral incluyó roles destacados como Licenciado en Sagrada Escritura en el Instituto Bíblico de Roma, docente y Vicerrector del Seminario Pontificio de Santiago, y Decano de la Facultad de Teología en la Pontificia Universidad Católica de Chile.

En 1986, Monseñor Moreno Casamitjana fue elegido Obispo Auxiliar de Santiago y ordenado obispo el 9 de julio del mismo año. Tres años más tarde, en 1989, fue nombrado Arzobispo de Concepción, donde lideró múltiples iniciativas pastorales y educativas. Su legado continúa inspirando a la comunidad de la UCSC y a la región, destacándose su contribución a la formación integral y al desarrollo espiritual de innumerables estudiantes y fieles.