Se ha determinado que la participación de mujeres en las áreas STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas, por sus siglas en inglés) es fundamental para el desarrollo del conocimiento y la construcción de soluciones innovadoras para los desafíos globales. Sin embargo, a pesar de los avances en equidad de género, la presencia femenina en estos ámbitos sigue siendo menor en comparación con sus pares masculinos, no por falta de talento o capacidad, sino por barreras culturales y estructurales que han limitado el acceso y crecimiento en estos espacios.
Estas barreras son incompatibles con la igual dignidad de hombres y mujeres, y es necesario trabajar para eliminarlas, fomentando el liderazgo femenino en STEM y creando espacios inclusivos donde las mujeres puedan desarrollar todo su potencial.
Nuestra participación en disciplinas STEM no es solo cuestión de inclusión, sino también de avance científico y tecnológico. Así como la interdisciplina es clave para la innovación, los equipos que incorporan múltiples perspectivas, tienden a generar soluciones más creativas y efectivas a las problemáticas. Pero para que sea posible, es necesario eliminar prejuicios y estereotipos, priorizando la igualdad de oportunidades.
El liderazgo femenino en STEM es esencial. La inclusión de más mujeres en STEM también sirve como modelo a seguir para las nuevas generaciones, demostrando que la ciencia y la tecnología son espacios abiertos para todos y todas.
Otro aspecto es la relación entre la participación femenina en STEM y el desarrollo sostenible. Las mujeres hemos sido protagonistas en la búsqueda de alternativas para los desafíos ambientales y sociales de la actualidad. Desde el diseño de energías limpias hasta la creación de estrategias para mitigar el impacto del cambio climático, nuestro aporte es invaluable.
Por eso, en la Universidad Católica de la Santísima Concepción (UCSC), estamos comprometidos con fomentar el ingreso y la permanencia de mujeres en carreras STEM. A través de iniciativas que fomentan el acceso, fortalecen su formación y buscan reducir brechas de género, trabajamos para que cada vez más mujeres tengan la oportunidad de desarrollar su talento en estas áreas. Siguiendo el llamado del Papa Francisco a reconocer el rol fundamental de la mujer en la sociedad y en la Iglesia, promovemos una cultura de equidad e inclusión.
El Santo Padre ha enfatizado la necesidad de una mayor participación femenina en ámbitos de liderazgo y ha denunciado las desigualdades estructurales que limitan su desarrollo. Inspirados por su mensaje, buscamos construir un entorno donde las mujeres puedan ejercer plenamente sus capacidades y contribuir a la transformación de nuestra sociedad.
El desafío de aumentar la participación femenina en STEM es de la sociedad en su conjunto. Desde el sistema escolar hasta el mundo laboral, es necesario impulsar cambios que permitan a más mujeres desarrollar su talento. Garantizar la igualdad de oportunidades y reconocer el impacto de las mujeres en la investigación y la innovación no solo beneficiará a las generaciones actuales, sino que también marcará una diferencia en el futuro de la humanidad.