El uso del telescopio en astronomía nos ha brindado una visión más amplia del universo conocido. Han pasado más de 400 años desde que Galileo Galilei, a partir de sus observaciones pioneras, refutará la visión del mundo geocéntrico y estableciera la visión copernicana, a partir de este momento se creó una revolución en el conocimiento que cambió la forma de ver el mundo.
Chile a lo largo de los años, por la calidad se sus cielos, cuenta con el ojo más sensible sobre el planeta Tierra y se ha posicionado como la capital mundial de la astronomía. Desde aquí, se han descubriendo nuevos mundos y llegó la hora de ir un poco más allá de los telescopios gigantes -de 8 a 10 metros- a los extremadamente gigantes.
Sobre suelo chileno se están construyendo dos grandes proyectos: El Telescopio Gigante de Magallanes (GTM), el que estará ubicado en el Observatorio de las Campanas a unos 115 kilómetros al Noreste de la Serena y el Telescopio Europeo Extremadamente Grande (E-ELT), el que será ubicado en Cerro Armazones en el desierto de Atacama. Estos telescopios de 24.5 y 39 metros respectivamente son parte de la nueva generación de telescopios ópticos y su terminación está prevista para el 2022, cuando captarán las primeras luces.
El principal objetivo de estos instrumentos, será detectar las débiles señales de planetas similares a la Tierra y obtener las primeras imágenes directas de tales objetos e incluso analizar sus atmósferas en la búsqueda de biomarcadores que puedan indicar la presencia de vida.
Adicionalmente, estos instrumentos permitirán resolver muchas preguntas de física teórica y llevar al límite las leyes que rigen la naturaleza haciéndolas cada vez más universales. A partir de las nuevas observaciones podremos probar la relatividad general de Einstein en condiciones extremas.
La nueva generación de telescopios como el GTM y el E-ELT tendrán capacidades únicas y los aportes de otras fuentes como el LSST y Pan-STARRS maximizarán su impacto. Así que, debemos prepararnos desde ahora, para enfrentar los nuevos retos tecnológicos y toda la potencialidad que brindarán estos instrumentos a la Ciencia futura.