Emergencia sanitaria de invierno: ¿cómo prevenir el virus respiratorio sincicial? – UCSC
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Emergencia sanitaria de invierno: ¿cómo prevenir el virus respiratorio sincicial?

Por Camila Meza Sparza

Cada temporada de otoño-invierno es sinónimo de la proliferación de virus estacionales, lo que se traduce muchas veces en el colapso de los recintos asistenciales producto de la alta demanda de pacientes que necesitan atención de especialistas, y este año no es la excepción. Aquello es consecuencia los ambientes fríos y la poca ventilación en los hogares y establecimientos, generándose un escenario propicio para el desarrollo de cuadros respiratorios masivos en los colegios y en las familias.

Sin duda, la situación anterior obliga a estar alerta y aumentar las medidas de precaución contra enfermedades respiratorias. Así lo aclaró el pediatra de la Facultad de Medicina de la UCSC, Ignacio Stemberga, quién explicó que, a diferencia de los años de confinamiento, hoy están circulando los virus estacionales de invierno habituales como la Influenza, Parainfluenza, Adenovirus y el Virus Respiratorio Sincicial (VRS).

Pero, ¿qué es el Virus Respiratorio Sincicial? el especialista indica que el VRS se ha convertido en la principal causa viral de infecciones como la Bronquiolitis (Inflamación de las vías respiratorias pequeñas de los pulmones) y la neumonía entre niñas y niños pequeños en todo el mundo. Es altamente trasmisible, y se disemina por medio de gotitas de la saliva de personas sintomáticas por tres a ocho días, pudiendo durar hasta 15 días en la vía respiratoria.

«Las personas con más probabilidades de presentar una infección grave por VRS, y podrían ser hospitalizadas, son los niños menores de dos años y adultos mayores, especialmente si son inmunocomprometidos o si además tienen otras patologías de base. Los síntomas se presentan dentro de los cinco a seis días después de haberse infectado y generalmente incluyen moqueo, apetito reducido (en bebés y niños), tos, estornudos, fiebre y sibilancias. En los bebés muy pequeños, los únicos síntomas podrían ser irritabilidad, menor actividad y dificultad para respirar. Casi todos los niños presentarán una infección por el VRS antes de cumplir los dos años», sostuvo el profesional.

El pediatra agregó que este virus no tiene vacuna, por eso cobra más relevancia vacunarse contra el Covid-19 para evitar la coexistencia simultánea con otros virus, en el caso de niños mayores de tres años. Actualmente no existe tratamiento específico, pero se pueden manejar algunos síntomas como fiebre, con antipiréticos indicados por un médico, además de mantenerse hidratado y volver a consultar en un centro de salud si los síntomas persisten o empeoran.

«Entonces, madres, padres, y cuidadores, no deben olvidar que la medidas preventivas son las mismas para todos los virus respiratorios: lavado frecuente de manos, cubrirse con el antebrazo al estornudar o toser, ventilar los domicilios y utilizar mascarilla», recalcó Stemberga.

Bajas temperaturas

Las temperaturas mínimas registradas diariamente las últimas semanas serían las gatillantes de estos cuadros, sin embargo, el médico de la Facultad de Medicina, Nicolás Saá manifestó que el frío por sí mismo no es causante de enfermedad, pero puede producir en el organismo una disminución de la efectividad de sus defensas. Por ejemplo, puede disminuir el movimiento de los cilios (ciliostasis), que son unas pequeñas vellosidades que cubren la superficie de las células de recubrimiento del árbol respiratorio que se mueven constantemente para barrer con la mucosidad que retienen y también los virus. Entonces, al disminuir la temperatura, estos se paralizan y dejan de funcionar en forma adecuada, permitiendo a los virus atravesar estas células e infectar.

«También hay estudios que demuestran que, si la vía aérea se expone al frío, hay una menor respuesta inmune ante agentes invasores virales. Esto le afecta a toda la población, pero especialmente a niños pequeños y pacientes de tercera edad», indicó el académico.

¿Qué medidas de prevención podemos tomar ante el frío en el exterior? Saá recomendó que, dado que el frio afecta la actividad del barrido ciliar, una buena medida es el uso de mascarilla, y colocarse una bufanda alrededor de la nariz, porque permite que la temperatura de la vía aérea sea más cálida.

El especialista sostuvo que «en el interior es necesario ventilar los espacios cerrados de forma rutinaria, evitar la contaminación intradomiciliaria (no fumar, prender y apagar estufas a parafina fuera del hogar, evitar el uso de braseros), limpiar y desinfectar superficies, al toser cubrir la nariz y boca con antebrazo, lavado de manos en forma frecuente, cubrir filtraciones en ventanas y puertas para mantener una temperatura adecuada. En niños, evitar el sobreabrigar para que no transpiren en exceso, evitar cambios de temperatura en niños y adultos mayores, y también para ambos grupos evitar las aglomeraciones».

Por último, ambos profesionales de la salud, recalcaron la necesidad de cumplir con los hitos de vacunación correspondiente a cada grupo etario. También es importante reforzar el sistema inmune a través de una dieta equilibrada, horas de sueño adecuado para la edad, disminución del estrés y evitar el contacto con personas enfermas.