Reflexionar sobre el aporte que puede tener la ciencia del lenguaje en la creación de mecanismos y políticas que retroalimenten, atiendan y faciliten la interacción pertinente con el adulto mayor, es lo que da cuenta el investigador del CIEDE y académico del Magíster en Lingüística Aplicada, Dr. Cristian Santibáñez, en el artículo publicado en la revista Lingüística y Literatura de la Universidad de Antioquía (disponible aquí), “Generosos y empáticos o ¿pragmáticos y utilitaristas?: los argumentos del adulto mayor chileno frente a un dilema social”.
En el estudio participaron alrededor de 600 adultos mayores de las regiones de Coquimbo, Biobío y Metropolitana, involucrados en las respuestas a los instrumentos de la investigación durante los tres años que duró la investigación. La iniciativa forma parte de una línea de trabajo que comenzó en 2013 con el proyecto Fondecyt Regular (No. 1130584), titulado “Valor, función y complejidad argumentativa en estudiantes universitarios chilenos: el caso en las regiones de Coquimbo y Metropolitana”.
Ante el interés de conocer sobre esta temática, un aspecto destacó: la producción de discurso argumentativo. “Lograr una descripción y explicación adecuada y sistemática de la competencia y conducta lingüística de argumentar de los adultos mayores contribuye decididamente en la tarea de aportar la ciencia del lenguaje en la creación de mecanismos y políticas que retroalimenten, atiendan y faciliten la interacción pertinente con el adulto mayor”, explicó el investigador.
Lo anterior, debido a que los adultos mayores “deben seguir tomando decisiones fundamentales, participando de discusiones de carácter social que exigen mantener cierto nivel de proficiencia argumentativa, interactuando con generaciones más jóvenes que toman como orientación varias de sus visiones y, entre otros desafíos importantes, forma parte de la fuerza laboral respecto de la cual ya es parte relevante”.
Calidad de argumentos y fluidez del habla
Un aspecto importante de los hallazgos del estudio se relaciona con el vínculo entre dimensión fonética y discurso argumentativo. Sobre esto, el Dr. Cristian Santibáñez indicó que “existe una relación entre calidad de los argumentos y fluidez del habla en adultos mayores, específicamente en lo relacionado con el número de palabras y la duración de las pausas. Las razones y puntos de vista de mejor calidad se caracterizan por contar con un mayor número de palabras y una mayor duración de las pausas. Nuevas investigaciones debieran esclarecer, particularmente, si las pausas en efecto se relacionan con un proceso reflexivo, o si solo se relaciona con una incapacidad, o desgaste, en el sistema cognitivo del adulto mayor de disminuir las pausas y hacer de su oralidad, en un contexto argumentativo, más fluido”.
“También observamos que las variables sociales nivel educacional y nivel socioeconómico del adulto mayor, están en una relación directa de afectar el desempeño argumentativo del adulto mayor. Este contexto socioeconómico que en Chile determina varios procesos individuales y colectivos, manifiesta un vínculo en términos de mejor nivel socioeconómico y mejor educación y, por tanto, mejor desempeño argumentativo. Nuevas investigaciones debieran determinar qué variable específica en este grupo juega un papel principal y, si hablantes que no poseen estatus socioeconómico alto, o no han tenido educación privilegiada, aun demuestran una buena calidad argumentativa”, añadió el investigador del CIEDE.
Nivel social y disciplina lingüística
A nivel social, el proyecto buscó proveer información que resulte útil para el diseño de políticas públicas destinadas a favorecer la participación social de los adultos mayores en instancias que apoyen la preservación de sus capacidades intelectuales y de interacción comunicativa.
Desde el punto de vista de la disciplina lingüística, en tanto, “contar con una caracterización de la competencia argumentativa de este grupo etario permite ir avanzando en una mirada ontogénica y dinámica de esta facultad, mirada que, a su vez, brinda información para realizar nuevos vínculos con otras sub-competencias lingüísticas”, sostuvo el Dr. Cristian Santibáñez.