Natalia Quiero S.
En abril pasado escribió la primera palabra para su tesis Loreto Vera, alumna de Cuarto Año de Licenciatura en Filosofía del Instituto de Teología, mientras que en mayo comenzó la investigación para su tesina Sebastián Pérez, quien cursa Quinto Año de Derecho.
Así, ambos estudiantes de pregrado de la UCSC empezaban a enfocarse de lleno en los trabajos que, respectivamente, les llevarán a obtener su grado de licenciatura y para cuyo desarrollo tendrán un aporte económico otorgado por el Fondo Interno de Apoyo a la Ejecución de Proyectos de Investigación para Estudiantes de Pregrado 2020, liderado por la Dirección de Investigación (DI) de la Universidad, cuyo principal objetivo es incentivar la cercanía de los alumnos de pregrado a la investigación científica mediante la entrega de financiamiento para realizar las actividades conducentes al título profesional.
Los resultados de la convocatoria se dieron a conocer recientemente y los jóvenes son dos de los ocho adjudicados, junto a Javiera Urra y Sofía Salazar, de Ingeniería Civil Industrial; Héctor González, de Ingeniería Civil Eléctrica; Natalia Ojeda y Roberto Matheu, de Licenciatura en Historia; y Henry Garrido, de Licenciatura en Filosofía. Todos, representando a distintas áreas del conocimiento en las que forma y contribuye a su desarrollo la Institución, son los primeros seleccionados del concurso que este segundo semestre de 2020 tuvo su versión inicial.
Recepción y resultados que destaca la Directora de Investigación, Dra. Lorena Gerli, no sólo porque fue la primera vez de la convocatoria, sino que además se realizó en plena crisis sanitaria por la pandemia de Covid-19, y se volverá en un apoyo efectivo y fundamental para el desarrollo de los proyectos en los que están trabajando los jóvenes. “Este fondo concursable entrega hasta 500 mil pesos para costear distintos insumos necesarios para la actividad que los lleve a obtener el título profesional y entre las solicitudes destacan libros, notebooks, tablets y también equipos para trabajo en terreno”, detalla, resaltando la adjudicación como “un premio para los ocho jóvenes, porque son muy buenos estudiantes de las distintas carreras”.
Justamente, Sebastián Pérez adquirirá un notebook que dedicará a su investigación “Problemas a la Ley de Protección al Empleo”, tesina guiada por la académica Yenny Pinto, a quien agradece “por incentivarme a participar”, para la que requiere realizar un extenso análisis bibliográfico de los alcances y vacíos de la legislación chilena creada para paliar los efectos que la crisis sanitaria de Covid-19 ha tenido en lo laboral, además de una comparación con la legislación española, que fue la base para diseñar la nacional. “Con mi nuevo equipo, que podré usar a tiempo completo, sin dudas mi investigación avanzará mejor y más rápido”, asevera.
Por su parte, Loreto Vera, con el aporte comprará los libros que necesita para su estudio “Pasividad del Ciudadano en la Política en Victoria Camps”, sobre ética y política con perspectiva de género, y costeará la impresión de la tesis guiada por la académica del Instituto de Teología Dra. María Luisa Brantt, la misma que la motivó a postular. “Una de las trabas que tenemos los tesistas de Filosofía es la bibliografía. Es demasiado cara y para acceder a los ejemplares de libros que están en la biblioteca hay que tramitarlo con anticipación”, y reconoce que no siempre se tiene tanta claridad de los temas a investigar o desarrollar mucho tiempo antes de comenzar formalmente las tesis y este 2020 se hubiera sumado la pandemia como una dificultad del acceso a los textos.
El inicio
Todos los jóvenes seleccionados valoran la convocatoria como una gran oportunidad e, incluso, como necesaria su existencia, dado que la realidad de muchos hace complejo acceder a todos los insumos necesarios para ejecutar sus trabajos y más aún en el contexto actual, cuando las dificultades se han acrecentado con los distintos efectos sociales de la crisis sanitaria.
“En pregrado, la mayoría de los alumnos no tenemos un ingreso económico y hay materiales como libros o dispositivos tecnológicos que son necesarios para desarrollar nuestras actividades y se vuelven difíciles de adquirir. Este financiamiento nos ayuda bastante y que exista esta iniciativa es un impulso para los estudiantes para desarrollar investigaciones de manera más completa”, sostiene Sebastián Pérez. “Poder a optar a esto es maravilloso y quiere decir que la Universidad tiene una preocupación por sus alumnos y que nos apoya”, destaca Loreto Vera.
Es por ello que la Dra. Lorena Gerli asegura que el anhelo es que “éste sea el inicio de este fondo concursable y esperamos lanzarlo nuevamente el primer semestre de 2021 y así también tener más convocatorias que beneficien a los estudiantes de nuestra Universidad”.
Al respecto, aclara que la mencionada es una de las iniciativas que la DI ejecuta para apoyar a jóvenes que cursan su pregrado en la UCSC en distintas instancias de su formación, ya sea durante el transcurso de su carrera o al final de esta, como esta convocatoria.