Por Javier Martínez G.
Este año 2023, la Universidad Católica de la Santísima Concepción reconoce el área de Energía como una nueva área prioritaria de investigación e innovación, la cual se suma a las ya existentes que son la de Desarrollo Costero Sustentable, y la de Educación y Desarrollo en Contexto de Vulnerabilidad. Además, las áreas de Ciencias Económicas y Administrativas, y Matemáticas y Físicas Aplicadas se suman a las de Salud, Recursos Hídricos y Ciencias del Deporte como áreas emergentes.
Al respecto, el Vicerrector de Investigación y Postgrado, Dr. Antonio Brante, afirmó que la decisión de establecer áreas prioritarias de investigación es una estrategia institucional que se adoptó en 2015, al declarar el área de Desarrollo Costero Sustentable y la de Educación y Desarrollo en Contexto de Vulnerabilidad.
“Esto permite, en primer lugar, reconocer y evidenciar las fortalezas de la universidad en áreas que también son de interés nacional e internacional; luego también permite focalizar las capacidades e inversiones en investigación e innovación que realizamos, y finalmente proyectar a la Universidad en áreas que den un sello a nuestro quehacer y de gran impacto a la sociedad”, explicó.
Trabajo colaborativo
Agregó que el poder reconocer ciertas áreas de interés, estimula el trabajo colaborativo multi e interdisciplinario en la Casa de Estudios. Esto no significa, afirmó, que otras áreas del conocimiento no sean de interés también para la Institución. De hecho, existen otras emergentes y también grupos de investigación e innovación en otras disciplinas del conocimiento, tanto del área científica como de humanidades. Todas ellas con distintos grados de madurez en su desarrollo.
Otro punto clave que subrayó es que la investigación e innovación son parte central de la misión y visión de la Universidad, así como hacer que esa creación de conocimiento e innovación pueda impactar positivamente en el bienestar de la sociedad. “En este sentido, estamos llamados a aportar a la solución de problemas y abordar desafíos de nuestro entorno con ciencia, conocimiento y tecnología. Por eso creemos que temas como el medio ambiente, la educación y ahora la reciente área reconocida como prioritaria de energía son desafíos presentes y futuro, en donde la institución puede aportar significativamente con sus capacidades”, subrayó.
Aparte, el Dr. Brante indicó que tanto las áreas prioritarias, emergentes y grupos de investigación e innovación reciben sustento y estímulos para fomentar su trabajo. Esto se traduce en instrumentos de apoyo que poseen las direcciones de innovación e investigación, así como fondos especiales en algunos casos.
“Ahora tenemos el desafío de poder ir incorporando de mejor forma estas temáticas en la formación de estudiantes con mayor transversalidad, en cursos tales como de Integración de Saberes, para darles una mirada más amplia y aportar a una formación más integral de los estudiantes. Sin duda, temas como cambio climático, hidrógeno verde/renovable, inteligencia artificial en educación, neurociencia, etc., deben estar presentes y poder discutir en torno a estos temas que conllevan también una componente importante de aspectos éticos. Estamos llamados como UCSC a poder abrir este tipo de discusión con los estudiantes y la comunidad en general”, destacó.
Agregó que todo el quehacer en investigación e innovación que se realiza en la UCSC debe tener como finalidad aportar al bienestar de las personas, tanto en el poder avanzar en el entendimiento del mundo que lo rodea, como del propio ser humano y persona. En este contexto, la ciencia del deporte, biomedicina, sociología, filosofía y teología, entre otras, van en ese camino de búsqueda de un bienestar integral.
“Sin perjuicio de lo anterior, la Universidad desarrolla también investigaciones en las áreas de las ciencias jurídicas, historia, comunicaciones, TIC, entre otras”, cerró.
Fortalezas
A su vez, la Dra. Lorena Gerli, Directora de Investigación de la UCSC, señaló que el objetivo de contar con estas áreas es seguir creciendo en innovación e investigación, junto con tener una directriz como Institución.
Lo otro que destacó es que existen varias fortalezas en estas líneas, como, por ejemplo, contar con capital humano cuando se lancen concursos, reforzar áreas que los claustros o núcleos de doctorado, además de los magísteres, para cubrir cubran las necesidades del país.
En ese sentido, también planteó lo relevante que es estar alineados con el trabajo que se pueda realizar en recursos hídricos, cambio climático o energía, “que son temas transversales que, como Universidad, hemos ido impulsando y aportando a la sociedad”.
Remarcó que las áreas, ya sean prioritarias o emergentes, no nacen por sí solas, para lo cual es necesario contar con capital humano avanzado para robustecerlas y que los académicos lleven adelante su carrera. “La idea es que postulen a proyectos, que hagan su investigación relacionada con estas áreas”, subrayó.