¿Mascarillas de género?: Especialistas UCSC advierten eficacia de este elemento de seguridad

Uno de los últimos anuncios de la autoridad sanitaria fue la obligatoriedad del uso de mascarillas en lugares públicos cerrados con más de 10 personas como supermercados, bancos, comercio, establecimientos educacionales. A esto se suma la ordenanza municipal de Concepción que indica que toda persona que transite por el espacio público deberá usar un recurso que cubra totalmente su boca y nariz.

Por esto, la demanda por este implemento de seguridad se ha multiplicado considerando que, al no contar con el elemento, las personas se arriesgan a una multa que pueden llegar a los 2,5 millones de pesos. Producto de esto, desde el Ministerio de Salud, recomendaron la utilización de mascarillas caceras. Sin embargo, especialistas advierten que podría llegar a dar una falsa seguridad, ya que deben ser complementadas con el resto de medidas de seguridad como el lavado de mano con agua y jabón, o si no hay con alcohol gel, distancia social y toser con el antebrazo.

“Estas se deben usar porque una gran proporción de personas que tienen coronavirus es asintomática, por lo que no se sabe si quién está a nuestro lado en supermercado, farmacias o locomoción tiene la enfermedad. Las autoridades nos han solicitado utilizar mascarillas de tela, pero estas tienen un 40 a 60% menos de eficiencia en comparación a la que usa el personal sanitario, por lo que podría provocar una falsa seguridad. Sin embargo, y considerando la emergencia, el stock quirúrgico debe ser para el uso del personal sanitario y para los que tienen coronavirus”, aclaró Maritza Muñoz, epidemióloga del Departamento de Salud Pública de la UCSC.

Misma opinión tiene la enfermera de la Facultad de Medicina UCSC, Paola López, quien precisó que la mascarilla de género, puede ser una barrera de utilidad variable de acuerdo a la permeabilidad del género usado, pero no es comparable con la eficiencia de las destinadas al personal de salud, las que cumplen con estándares de seguridad según el tipo de material.

Uso correcto de máscaras caseras
Muñoz explicó que este elemento no sirve cuando se humedece, por lo que hay que tener una de repuesto. La protección debe ser fijada sin ser tocada, en el tabique nasal, no dejando espacio entre la cara y la máscara. Previamente hay que lavarse las manos y para retirarla debe tomarse desde los elásticos o por detrás y debe ser guardada en una bolsa de plástico. Nunca debe reutilizarse sin ser lavada con agua y jabón o en la lavadora con detergente de manera normal.

“Primero, antes de usar una mascarilla de género, es necesario tener presente que se trata de una medida de autocuidado complementaria, que no reemplazará el distanciamiento social. No olvidar antes de usar una mascarilla, realizar lavado de manos con agua y jabón o aplicar alcohol gel, que esta debe cubrir nariz y boca por completo, evitar fuga de aire y que se desplace”, argumentó López.

Otro implemento que se está viendo cada vez con más frecuencia son los guantes desechables. En este caso se debe tener precaución, ya que también pueden dar una falsa sensación de seguridad. Son útiles al momento de hacer compras en el supermercado, farmacias o transporte público. No obstante, sólo hay que usarlos de la manera correcta como retirase sin tocar en ningún momento la piel.